INICIOINDICEBUSQUEDA
EL FRUTO PERFECTO DE LA DEVOCIÓN


08.01.91

-Bendito sea Nuestro Señor, que realiza constantes maravillas de amor por nosotros. Tú escuchas nuestras súplicas y nuestras peticiones cuando Te pedimos ayuda. Bendita sea Nuestra Santa Madre, que me ofrece una iglesia como regalo de mi cumpleaños, en la que nos 1 podemos reunir y rezar. Tú eres nuestra protección y nuestra esperanza.

-Flor, estate Conmigo. Dentro de diez días será tu cumpleaños, el día en que te llamé y te planté, flor. ¡Ah! mírame y agrádame. Eres Mi propiedad, Mi pertenencia. ¡Cómo te amo Yo, el Señor! ¡Cómo Me deleito en ti! Espiritualmente, tú estabas muerta, pero ahora te he resucitado para que vengas y vivas en Mi mundo. ¡Siéntete feliz! Porque, ¡mira lo que Yo te he dado! ¡Mira el tesoro que te he entregado! Tu meditación vale mucho. Este diálogo entre nosotros es un tesoro buscado por muchos, pero Yo te lo he brindado a ti y a ti te lo he ofrecido.

Yo he venido todo el recorrido desde el Cielo a tu morada para dártelo a ti como un regalo. Mi tesoro es buscado por muchos, pero muy pocos lo pueden tener, Vassula. Vassula estate en unión Conmigo, deseándome al mismo tiempo, porque éste es el fruto perfecto de la devoción. ¡Cómo Me regocijo de recoger este fruto! Ofréceme tu tiempo, ofréceme tu mano, sé Mi tablilla. ¿No te he santificado con Mi Santidad? Entonces, a tu vez ofréceme a ti misma, tu deseo y tu energía. Permíteme utilizarte, pequeña. Deja que Mi Amor te envuelva, paloma Mía.

Ámame.


1 el grupo de oración, una vez al mes