4.08.1996

Vengan, abramos un camino al Jinete de las Nubes. Que nuestras oraciones sean Su escalera. Desciende ahora, mi Señor, y estate con nosotros. ¡Maranatha! Yo te doy Mi Paz. Escúchame: Mi Santo Espíritu, tres veces Santo, Dador de Vida y Trono para los pobres de espíritu, clama hoy: "¡Vengan! ¡Vengan todos ustedes que Me desean y están sedientos de rectitud! ¡No pueden ser hijos Míos a menos que estén amamantados de Mis Riquezas! ¡Ah! ¡Tantos de ustedes están atados con las cadenas de la lujuria y de la oscuridad! Sin embargo, Mi Espíritu Santo puede llenar lo que ustedes carecen, para que Mi Palabra, en toda su gloria y soberanía, pueda morar en ustedes... Cualquiera que haya obrado mal ¡venga! Ven y humíllate y arrepiéntete para que Mis Ojos puedan deleitarse en ti. Cualquiera que no esté viviendo santamente ¡venga! ¡Ven a Mí y arrepiéntete! Yo te daré un corazón nuevo. ¡Cualquiera que todavía esté atado al mundo, que clame a Mí y Me pida que desate sus cadenas! ¿Por qué se mantienen atados a estas desordenadas inclinaciones mundanas que atacan su alma? Su adorno debe ser una pureza interior, su adorno debe ser la verdad, para que Mi Espíritu Santo no se aleje de ustedes... Ay de ustedes que han perdido la fuerza para perseverar. ( Si 2,14). ¿No han escuchado: "aquellos que temen al Señor hacen su mejor esfuerzo para agradarle"? 1 Si ustedes no sabían esto, vengan, humíllense y síganme y dejen que su amor crezca en Mí, para que su corazón nunca se desvíe de nuevo. Ah... Vassula, niña Mía, dime: "Jesucristo, Tú eres mi Vida, Tú eres mi Roca, Tú eres mi Salvación, Tú eres Mi Arquero". Y Yo te responderé: Mi niña, tú eres Mía, tú eres Mi semilla, tú eres Mi alegría, tú eres Mi objetivo, en quien Yo estoy lanzando bendición sobre bendición con el sólo propósito: de salvarte... Ven, recuerda, ¡Yo estoy siempre contigo! ¡Yo, Jesucristo, los bendigo a todos! 1 Si 2,16