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NO PERDONARÉ A LOS CAÍNES

29.09.1987

Dios mío, pareces estar descontento con algunas de Tus almas sacerdotales.

Vassula, ellos son responsables de tantas almas. No sólo caen ellos sino que también arrastran a muchas otras detrás de ellos.

Pero, Señor, debe haber muchos que son buenos, amándote, trabajando como Tú lo quieres. Conozco algunos.

¡Ah, Vassula! Hay muchos que siguen Mis instrucciones, sacrificados, viviendo humildemente, amándose los unos a otros, alimentando a Mis ovejas. Ellos son la sal de la tierra, los amados de Mi Alma, son Mis Abeles. Son el bálsamo para Mis Heridas, aliviando Mi Dolor. Para Mi tristeza, entre ellos están también los Caínes, las flechas de Mi Cuerpo, traidores, cegados por la vanidad, malos y con inclinaciones despreciables. Ellos son las espinas de Mi Cabeza, numerosos son sus pecados, la hipocresía es su maestra y contra ellos se enciende Mi Divina Justicia.

Toma Mi Mano, hija, permanece cerca de Mí y Yo te señalaré esas espinas. Te conduciré, con fuerza divina, a las profundidades de Mi Cuerpo. Te dejaré que reconozcas la hoja de la lanza. No perdonaré a los Caínes, Vassula, pues ¿qué tienen para ofrecerme? Sus manos están vacías y no tienen nada que ofrecer a Mis ovejas, les encanta mostrarse en público, les gusta ser acogidos obsequiosamente, son como sal que ha perdido su sabor. En verdad te digo, hija, ¡son los fariseos de hoy en día!


Oh, Señor, esto es terrible.

Vassula, por esta razón, todo lo que ha estado escondido saldrá a la luz, y todo lo cubierto, será descubierto, pues ésta es Mi Voluntad.

Ahora ven, no olvides Mi Presencia.


No, Señor. Te miro como a mi Santo Padre, Santo Amigo, Santo Hermano, y miro a la Santísima Virgen María como a Mi Santa Madre. Ustedes son mi Sagrada Familia, ¿cómo puedo olvidarlos?

Bienamada, también soy tu Esposo. Ésta es la forma en que deseo que tú ames, amándonos íntimamente, sin embargo, nunca olvidando que Nosotros somos Santos, honrándonos. Somos tu Sagrada Familia. Yo soy tu Dios. Permanece alerta.

Sí, Señor.

Vamos.

Vamos.


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